lunes, 12 de noviembre de 2012

Et voilà le canotier!!

Hoy la cosa va de sombreros.  Y en concreto de uno con el fondo y los bordes planos: el canotier.
Tenemos que irnos hasta 1880 para hallar el origen del canotier. Usado en sus inicios exclusivamente por hombres, lo utilizaban los gondoleros de Venecia, adornados con una cinta para distinguirse de los oficiales de marina y los colegiales de Oxford.
Las mujeres lo adoptaron rápidamente a principio de los años 30, pero tan sólo para hacer deporte. Más tarde se extendió su uso para las salidas campestres, tal y como podemos ver en la obra de Renoir  “Le déjeuner des canotiers”.
Con los años, el canotier se convirtió no sólo en el favorito de los actores en musicales de vodevil, también fue pensado para para completar la indumentaria de los agentes del FBI en tiempos de pre-guerra.


Pero no fue conocido internacionalmente hasta la llegada de Coco Chanel al mundo de la moda.
Revolucionó todo París al presentarse en el hipódromo tocada con un sombrero canotier y un traje sastre. Damas con corset, plumas y rellenos se rindieron a sus pies y comenzaron a lloverle los encargos.
Coco Chanel lo convirtió en uno de los símbolos de su marca.



 Los canotiers vuelven a estar de moda, y esto se debe, en realidad, a que Marc Jacobs los incluyó en su colección Crucero Primavera-Verano de 2009. Podemos verlos en la pasarela, en las invitadas más chic e incluso en el día a día en los looks con más estilo.

Vía: Lucía B


¿De qué está hecho?
Originariamente este tipo de sombrero estaba completamente hecho de paja trenzada. Aunque después también se hizo de  materiales más sofisticados como el encaje, la rafia e incluso la lona. La paja es perfecta para un look casual o romántico, combinado con un vestido cortos, estampados florales y  sandalias planas. El de encaje o rafia coloreada se reserva para un look más elegante, combinado con un vestido largo, monocolor si el canotier lleva adornos florales, tacones altos.






¿Cómo llevarlo?




 Podemos llevarlo ligeramente ladeado al estilo de Maurice Chevalier











O recto, como lo llevaron las modelos en el desfile de Jason Wu de 2011










O como lo llevaba Carlota Casiraghi en la coronación de su tío Alberto: hacia atrás, en la parte posterior de la cabeza.







¿Y el pelo, cómo lo pongo?
Por lo general, el canotier sienta bien tanto a cabellos cortos o recogidos. Ya sea con un moño bajo, de bailarina, un moño ladeado... si lo que queremos es un estilo más sobrio. Si el objetivo es llevar un estilo más romántico, lo ideal es una trenza un poco deshecha sobre uno de los hombros.
Pero para restarle formalidad a un look en el que el vestido es demasiado serio, lo ideal es llevarlo con el pelo suelto y desenfadado.



Vía: La hora de Teresa Baca
Vía: Rita Von
Vía: Suma Cruz
Vía: Suma Cruz
Vía: Casilda se casa
Vía: Suma Cruz
Vía: Rita Von
Vía: Lucía B

Foto: Retrato de un Instante Vía: Suma Cruz


Pero no tenemos que limitar este complemento a las ceremonias. Cualquier día de verano puede ser la ocasión perfecta para sacar a pasear un canotier.



Vía: Paper blog
Vía: Elle
Vía: Paper blog
Vía: Madrid is fashion

Vía: Trendencias
¿Os atrevéis a dejar a un lado las pamelas y tocados y adoptar un canotier en vuestra próxima boda como invitadas?

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